miércoles, 7 de mayo de 2014

42 voces sobre Gobierno Abierto



Siguiendo con su propósito de divulgar una forma de entender la Administración basada en la transparencia, la rendición de cuentas y de participación real de la ciudadanía,  La XIP, Red de Innovación Pública, acaba de publicar 42 voces sobre el Gobierno Abierto.

Se trata de un proyecto colaborativo de 42 breves artículos escritos por personas de todo el mundo que ofrecen una visión transversal y con muchos matices de lo que es el Gobierno Abierto.



Os dejo aquí mis reflexiones sobre la  Generación de dinámicas participativas

La participación está hecha de alma y de cuerpo.

El alma de la participación es el elemento fundamental que condiciona el éxito del proceso. El alma está compuesta de capacidad para aceptar la diferencia, voluntad de aprender, la cesión de poder que lleva a empoderar a los participantes, sinceridad, confianza y sobre todo mucha, mucha honradez.

Pero además a la participación hay que vestirla. Hay que dotarla de esos elementos prácticos que hacen que del conflicto surja la convivencia con la diferencia, que los legítimos intereses particulares se transformen en un proyecto común o que del conocimiento particular se obtenga inteligencia colectiva.

Esos elementos prácticos son los que configuran la metodología del proceso y más concretamente las técnicas y dinámicas participativas.

Es en este momento donde la participación abre el camino a la artesanía. Es artesana la combinación entre la seriedad en la planificación que garantice la calidad del proceso frente a la flexibilidad en el método que mantenga la mirada siempre puesta en la consecución del objetivo. En este sentido es en el que se dice que no valen las recetas. Habrá que buscar técnicas adecuadas para cada objetivo pero también para los valores y capacidades de los participantes.

Las dinámicas muchas veces hacen que la participación sea divertida. Detrás de esa ligereza que no es banalidad hay mucha pedagogía fuertemente arraigada en fundamentos neurofisiológicos. Bienvenidos sean los post-it de colores, las cartulinas con recortables o las piezas de lego.

Además cada momento del proceso exige una tipo de dinámica distinta. La apertura y cierre del proceso son momentos en el que necesitaremos todas las herramientas de que dispongamos para exponer la información de la forma más didáctica y cercana posible.

Así mismo, a lo largo del proceso será necesario crear las condiciones para que surjan propuestas que cuenten con el compromiso de los participantes. No se trata de organizar reuniones “por el placer de encontrarnos”, del proceso deben extraerse conclusiones y planes de acción. En este momento serán útiles las dinámicas que ayuden a extraer información y que conduzcan el diálogo de forma que se favorezca la creatividad.

Por último y según las características del proceso es bastante posible que se llegue a situaciones donde se haga necesario negociar o utilizar una vía de mediación. Que no nos pille por sorpresa.

En definitiva, hay cientos de dinámicas de participación que pasan del post-it y el voto a mano alzada a las más sofisticadas herramientas sociológicas o del tú a tú a las herramientas en red. Todas ellas son válidas. Lo fundamental al elegir una u otra es el objetivo que se pretende conseguir y la consideración del entorno en el que se quiere utilizar. Son esos dos factores los que nunca deben perderse de vista.